PolitiCamp del infierno
Ya habíamos platicado un poco de
las ideas que tenemos sobre la publicidad desde su origen hasta su mas oscuro propósito,
pero sin duda es un tema apasionante que da para escribir muchas cosas más,
estos días en Urbania el sol se eleva en los cielos con mas potencia que de
costumbre, las calles de asfalto hacen su función de sartén y todos los
animales que circulamos por ellas cotidianamente nos quemamos las patas y
desprendemos olores que podrían indicar que ya estamos listos para ser comidos
o como en la mayoría de los casos a causa del calor, que ya nos echamos a
perder; pero esto es común durante esta época del año lo que si es diferente en
esta bonita y olorosa ciudad es precisamente la publicidad.
En mi común recorrido por las
calles (pensaran que no tengo nada mejor que hacer y estarán en lo correcto) fui
notando como poco a poco al igual que las hojas de los árboles cambian de color
y caen rendidas ante la llegada del otoño, la publicidad en la ciudad fue
cambiando paulatinamente. Aquellos letreros que mostraban a una espectacular
mujer en bikini promocionando algún producto que nada tiene que ver con mujeres
en bikini fueron cambiados por rostros sonrientes y nombres enormes, cada uno
es acompañado de un código de color específico, no hace tanto que quitaron a
esas mujeres en bikini pero ya las comienzo a extrañar, esos nuevos anuncios
informan sobre la tempestad que se viene sobre la ciudad, informan que el
tiempo electoral esta aquí.
Siempre me he considerado un
animal político, bueno que puedo decir si hay filósofos que han descrito de
esta manera al ser humano, sin embargo la definición de política vista desde
esa perspectiva es totalmente distinta a la que tienen los que se jactan de
hacerla aquí en la ciudad, el hecho de que cada vez que hay elecciones se tenga
que elegir entre la opción menos mala y no entre la mas conveniente es un
indicador indiscutible de que desde hace tiempo las cosas no están nada bien,
pero ese es tema para otra ocasión (muy probablemente la siguiente) lo que nos
ocupa en este momento es un estudio realizado por el ya olvidado y ahora muy
descansado Centro de Investigaciones Sociales de Urbania quienes fueron sacados
de su estado de orgasmo mental por un servidor y puestos a trabajar en el análisis
de la publicidad utilizada por los candidatos que en esta ocasión pelean por el
poder y el control de Urbania.
La investigación se dividió en 3
partes que concentraron los anuncios impresos, los auditivos y los de televisión
los resultados nos dejaron mas dudas que respuestas como era de esperar.
En primer lugar e impulsados por
mi ira y nostalgia por aquellas voluptuosas mujeres en bikini los
investigadores salieron a la calle para descubrir que el mismo fenómeno que
afecto mi cotidiano campo visual estaba sucediendo a lo largo de toda Urbania,
como invasión extraterrestre de película de Hollywood las agradables chicas en
la playa fueron sustituidas por caras sonrientes y por nombres de colores
distintos al parecer todos los anuncios sin importar el color al que
pertenezcan tienen varios puntos en común. Lo primero que podemos preguntarnos
es lo siguiente: ¿En verdad esa es la mejor fotografía que le pudieron sacar al
candidato? En todos los casos las fotografías parecen haber sido tomadas por
los enemigos mas encarnados de estas personas y no por un supuesto grupo de
publicidad que se encarga de la imagen del chango en cuestión, las fotografías
son una mentada de madre, estoy de acuerdo que los candidatos no son modelitos
ni tienen porque ser atractivos pero ¡por Dios¡ ayúdenlos un poco; aparecen en
el caso de los hombres y no se si por casualidad o por estrategia con una
sonrisa que parece más un gruñido, es tan forzada la sonrisa que parecen perros
defendiendo su comida de algún extraño que intenta robárselas (o serán perros
defendiendo su hueso) la mayoría aparecen con camisa, corbata y hasta saco pero
otros mas casuales posan con un botón desabrochado y hasta mostrando su pelo en
pecho, la expresión de sus rostros denota frigidez y en muchos de los casos
estupidez cosa que nos lleva a nuestra segunda pregunta ¿en verdad quieres
ganarte mi voto? Las poses son otra cosa para llorar, si el candidato no
aparece caminando al lado de personas con la misma sonrisa fingida que ellos,
aparece entonces con los brazos abiertos como demostrando el tamaño de su
envergadura y de lo que alcanzará a cargar con sus brazos llenos de amor y de
justicia. En el caso de las mujeres la sonrisa continua siendo un común
denominador sin embargo ellas saben fingirla mejor, el cabello planchado, el
maquillaje de fichera y la vestimenta en su mayoría como de secretaria de
oficina de segunda. Nunca demostrando su opulencia, siempre acompañados de
frases que nos recuerdan la dura vida que han tenido y que están ahí para
ayudarnos a salir adelante al igual que lo hicieron ellos, sus nombres van
acompañados del color y escudo de sus partidos y de alguna que otra promesa que
hace volar la imaginación de los incrédulos como “no más impuestos para los
trabajadores” bonita promesa que de ser efectivamente cumplida vendría a darle
en la madre a la economía del país, pero no es momento de pensar en esas cosas
sino de convencer al animalero, la sonrisa que tienen en todas sus fotografías
es tan mal pensada que hay algunos que aparecen sonrienda al lado de frases
como “pena de muerte a los violadores de tu abuelita” se supone que estas
mencionando temas delicados ¿de que te ríes imbecil?.
En los que yo he llamado los
peores de los casos y que son un vomito auditivo y motivos para acudir a
terapia de grupo después de escucharlos son los spots en los que el altamente
creativo grupo encargado de la imagen del candidato tiene la brillante idea de
tomar el ritmo de una canción de moda (por canción de moda me refiero a esas
canciones que te rompen las bolas porque las pasan cada 3 minutos en las
estaciones de radio) y con toda su iluminación y capacidad le cambian la letra
para que diga mas o menos así: “ vamos todos a votar por fulanito, es el que
quiere que te vaya bien, vamos todos a votar por fulanito es el que va a hacer
tu dinero crecer, quiere a tu familia, quiere hasta a tu perro, salio de entre
nosotros, viene desde abajo, el no va a robar, el no va a mentir lo único que
quiere es salvar al país” según pruebas que realizamos en este centro cada vez
que escuchas una canción de estas (oh si, son varias) muere un hada, tiembla en
Japón y pierdes como 150 neuronas en tu cerebro, nuestra recomendación
científica es que cambies de estación o de plano apagues la radio.
Finalmente están los bonitos
anuncios por televisión, los cuales desgraciadamente van acompañados de las
canciones rompe bolas mata neuronas que mencionamos anteriormente y en los que
se muestra que el candidato si es banda, si es raza, si es pueblo, porque sale
ahí en la mas cochina de las vecindades abrazando a niños greñudos y piojosos y
jugando futbol con ellos o comiendo tortillas de doña Pelos que tiene por comal
un cofre de automóvil abandonado, después el candidato voltea a la cámara con
su sonrisa/gruñido y dice “por ellos voy a luchar para que tengan mejores
oportunidades” o alguna jalada de pelos así (cuantos pelos) después viene un
corte y puff por arte de magia los niños aparecen bañados, peinados y
uniformados saliendo del colegio, afuera los espera doña Pelos que esta
irreconocible con un vestido y una sonrisa de oreja a oreja y obviamente
acompañada del salvador del pueblo que irradia una luz blanca de su interior y
hasta tiene alas y aureola se despiden con una frase que va mas o menos así
“Todos juntos hacemos el cambio” la verdad sería bueno que el equipo de
publicidad le pusiera una mascara al candidato porque nunca puede ocultar la
repulsión que siente por estar al lado de esa gente a la que trata de convencer
para que le den su voto.
Por falta de estomago decidimos
terminar la investigación en este punto y nos surgieron algunas preguntas.
Hemos mencionado constantemente a un equipo de imagen y publicidad encargado de
posicionar al candidato en el gusto del pueblo pero ¿en realidad existe este
equipo? Cabe hacer esta pregunta al ver las arrugas y ojeras con las que salen
los candidatos en los espectaculares, al ver los tonos disparejos de su piel en
unas fotografías muy rojos en otros muy pálidos ¿saben utilizar programas de
edición? ¿Cuánto les pagan? Porque si fuera yo el candidato y viera mi foto
desenfocada y mi cara de idiota arriba de un edificio los corría a patadas en
el acto, que decir lo que les haría al escuchar una canción tan estúpida que
mencione mi nombre cada 3 segundos con rimas más forzadas que las de Ricardo
Arjona y finalmente los desterraría a la luna al ver un comercial de televisión
igual al de todos mis competidores, los mandaría a la cárcel mas oscura de la
ciudad eso si fuera yo el candidato.
Definitivamente lo más increíble
de esta publicidad política es el pensar que cada partido paga millones de
pesos para su creación y después para su difusión y que esos millones de pesos
salen directamente de nuestros bolsillos, la idea de que tengan todo un equipo
de “expertos” enfocados a la imagen y publicidad de cada candidato es un mito,
una leyenda urbana, no me sorprendería descubrir que se le paga al “publicista”
que cobre mas barato y facture mas alto para que componga las fabulosas letras
de las canciones promocionales.
La conclusión de la investigación
realizada es definitiva, la publicidad utilizada en las campañas políticas en
Urbania (una vez más espero sinceramente que no sea así en su ciudad) es tan
mediocre como las propuestas y como los mismos candidatos a los que representan
por lo que simulando que esto fuera un pronostico del tiempo les puedo decir
que se avecina una tormenta sin importar cual sea la asquerosa cancioncilla que
les mueva mas la cola en estas elecciones, todo es pasajero dicen por ahí y confiando
en que esto sea cierto caminare como de costumbre esperando a que cambien los
rostros sonrientes de los espectaculares por las mujeres en bikini anunciando roto
martillos. Nos vemos en la calle.
Agente 07
En terapia de grupo
tratando de borrar melodías indeseables
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