lunes, 27 de agosto de 2012

ley


¿Y ahora que?


 En una ciudad del tamaño de Urbania (y me imagino que es lo mismo en la que ustedes habitan) sería imposible habitar si no estuviera plagada de leyes y restricciones que nos enseñan o guían por el camino del “buen ciudadano” de este modo podríamos decir que literalmente hay leyes que regulan hasta el comportamiento en los sanitarios, algunos expresados de manera muy formal, otros con creativos letreros como “apuntale bien, no manches la taza” y cosas por el estilo. Lo cierto es, y sin ánimos de parecer un paranoico, que sin esta bola de restricciones la ciudad sería un caos, la naturaleza salvaje de todos los animalitos que habitamos la ciudad no tardaría ni 5 minutos en brotar y convertir todo en una anarquía total, si creen que estoy exagerando los invito a realizar un pequeño experimento, busquen algún cruce de calles en donde los semáforos no funcionen y tomen tiempo en su cronómetro para saber cuanto tarda aquello en convertirse en una zona sin ley en donde solo cruza el mas valiente (y mas suertudo si no le toca un choque) no creo que sea necesario que lo comprueben seguramente les ha tocado vivirlo en carne propia.
Ahora hay que considerar que ese es solo un pequeño ejemplo de lo rápido que perdemos el control sin leyes que nos regulen, imaginen que sucedería si de repente todas las leyes fuesen anuladas, he aquí una pequeña visión de una realidad alterna en la que la ciudad de Urbania quedo de repente sumergida en la anarquía total.
Todo comenzó con una manifestación, como cualquier otra de las miles que se dan a lo largo del año en la ciudad, el motivo de esta manifestación fue la aprobación de una polémica ley que permitía que el actual presidente tuviera poder absoluto sobre las decisiones finales en todos los ámbitos, dicho en otras palabras, pasaría de ser presidente a ser rey, medida que el congreso considero como la única solución al problema de corrupción y desigualdad que constantemente crecía en la ciudad, el presidente, hombre de carácter fuerte y sin remordimientos morales estaba llamado a ser un dictador terrible, sin temor a nada comenzaría una lucha encarnizada en contra de todo el sistema corrupto para realizar una limpia del sistema y poder comenzar desde cero una nueva sociedad, la decisión no fue fácil, muchos intentos se realizaron para tratar de solucionar la situación actual de alguna u otra manera pero ninguno dio resultados, la conclusión de todos fue la misma, poner a un exterminador al frente para así poder borrar lo malo y comenzar lo bueno.
La noticia, como era de esperarse levanto una gran controversia, no solo en la ciudad sino en todo el país y como en otras ocasiones se convocó a una mega marcha para protestar contra el gobierno impuesto, solo que esta ocasión había algo diferente, ahora si la sociedad en su totalidad estaba completamente en desacuerdo con la medida tomada unilateralmente por sus representantes, los medios de comunicación, instrumentos de manipulación masiva, ahora apoyaban la causa social y no al orden establecido por lo que todos los asistentes a la marcha gritaban furicos y convencidos que no aceptarían la imposición. Entre toda la mancha de gente que se podía ver desde el balcón presidencial, se observaba a gente de distintas edades y extractos sociales, incluso madres con sus niños en los brazos gritando enardecidas, los ejemplos de dictaduras que habían sufrido países vecinos les indicaban que esta no era una buena idea, sin embargo para el ahora rey de la ciudad esta parecía una oportunidad perfecta para realizar su primer acto de represión, con toda la ciudad reunida y mirando hacia él no podría encontrar mejor ocasión para dejar las cosas claras, conforme la multitud se acercaba al palacio municipal, policías armados comenzaron a formarse y a construir una barrera humana, todos con rifles de alto poder y apuntando a la multitud que sorprendida por esta visión, se detuvo al llegar a las puertas y guardo un silencio sepulcral, fue entonces cuando la gloriosa aparición del rey ocurrió en el balcón, saludando como se ha visto al Papa hacerlo a la multitud reunida en la plaza de San Pedro, llegó hasta un micrófono ubicado al borde del balcón y con una firme voz fue directo al grano “Buenos días ciudadanos, les informo que este tipo de manifestaciones ya no están permitidas por lo que contaré hasta 3 para que se dispersen o daré la orden de que se dispare a discreción” dicho esto comenzó a contar, los gritos, insultos y caras de sorpresa aparecieron de inmediato en el lugar, muchos comenzaron a retirarse, otros dudando la veracidad de esta amenaza se mantuvieron firmes en su lugar; “Uno”… silencio total, la mayoría de la gente firme en sus lugares “Dos”… algunos más comenzaron a retirarse al ver la seguridad con la que el dictador manejaba su voz, los policías comenzaron a preparar sus rifles, el sonido característico de la recarga de balas se convirtió en una melodía perfectamente sincronizada, entre ellos se veían sudorosos y con muchas dudas, una cosa era el trabajo y disparar en defensa propia pero eran sus vecinos desarmados los que se encontraban ahí, los rifles temblaban en sus manos, los ciudadanos permanecían firmes “tre….”
Antes de que pudiera terminar su fatídico conteo un disparo solitario rompió el silencio incomodo he hizo eco en cada rincón de la plaza, los policías volteaban verse confundidos, tratando de encontrar al culpable y valiente que se atrevió a realizar el primer disparo, sin embargo el sonido había sido distante, nadie en esa formación había oprimido el gatillo. Los ciudadanos por su parte volteaban frenéticamente buscando a la víctima de ese disparo y esperaban una lluvia de plomo sobre ellos, algunos incluso tocaban sus pechos y se examinaban para comprobar que no estuvieran heridos, nadie parecía haberse cruzado en el camino de esa bala, el silenció duro solo unos segundos más, el golpe seco de un cráneo estallando contra el pavimento lo rompió una vez mas, el cuerpo del dictador cayó de su balcón herido de muerte mientras todos trataban de encontrar a la víctima y al victimario entre sus filas.
Un grito de triunfo surgió de entre la muchedumbre, los policías ahora sin comandante que les diera ordenes se hicieron a un lado mientras que la multitud corría rumbo al palacio municipal para tomar sus instalaciones, fue un grave error pensar que no serían molestados por la turba iracunda a la que hace menos de un minuto tenían en sus miras, la tarde se tiño de rojo, los cuerpos de los policías y de varios representantes públicos fueron colgados alrededor del edificio la imagen a la mañana siguiente era macabra, los adornos humanos aún goteaban sangre tibia, el pueblo había realizado lo que creían sería lo mejor para todos, un golpe de estado para derrocar al gobierno, solo que olvidaron un pequeño detalle antes de realizar un movimiento tan fugaz, olvidaron definir quién quedaría al mando del gobierno una vez que ellos tuvieran el control, pequeño y fatal detalle.
Se imaginarán que al pasar el primer día de festejos generales en la ciudad por haber derrocado al gobierno opresor, comenzaron las disputas por los puestos de poder, al no ser capaces de organizarse y haber nacido del seno de la violencia la ciudad entera entro en competencia por tomar los lugares de privilegio, pero cada vez que alguien se proclamaba el gobernante una nueva multitud surgía inconforme con la propuesta y un cuerpo más colgaba del palacio municipal.
Poco a poco la falta de autoridades se fue reflejando en todos los aspectos de la ciudad, al no haber un cuerpo de policía para mantener el orden, la ley que imperaba en las calles era la ley de la bala, los bancos se fueron a pique, los negocios se convirtieron en fortalezas de personas armadas hasta los dientes que primero disparaban y después preguntaban “¿encontró todo lo que buscaba?” los servicios básicos como el agua y la electricidad duraron un poco más, sin embargo no paso mucho tiempo para que un grupo armado se alzara con el control de estos y comenzara a cobrar altas cuotas para quién deseara continuar disfrutando de estos beneficios, media ciudad cayó en la oscuridad, las personas adineradas de los fraccionamientos exclusivos utilizaron sus recursos para escapar, justo antes de que sus casas fuesen allanadas por grupos de ladrones dispuestos a todo por quedarse con sus posesiones, algunos no tuvieron la suerte de escapar a tiempo, las mujeres fueron violadas, los hombres asesinados y las enormes viviendas fueron otro hueso en disputa por la ahora enorme cantidad de perros que inundaban las calles y peleaban por hacerse de algo. Escapar de la ciudad no era nada fácil, retenes de personas se encontraban en todo el perímetro y a pesar de la gran cantidad de personas que intentaba huir eran pocos los que lo conseguían hacer ilesos.
Paso solo un mes para que las calles de la ciudad parecieran una escena de película del fin del mundo, automóviles incendiados, cadáveres pudriéndose en las esquinas, hierba creciendo en las calles ya que nadie se atrevía a salir en su coche y circular por la ciudad. En general se perdió el sentido de la pertenencia, nadie poseía nada en realidad, todo era relativo y estaba a expensas de que no llegara otra persona con un arma más grande y te lo arrebatara. Las fachadas de las viviendas ahora lucían diferentes, no había ninguna que no tuviera tablones reforzando las ventanas y letreros de “aléjese le estamos apuntando” aquellos tiempos en los que los tapetes que decían Bienvenidos a la entrada de las casas había quedado atrás.
Las escuelas, auditorios e iglesias se convirtieron en refugios para las personas que aún deseaban convivir con sus semejantes e intentaban respetar las normas de la civilización en la que vivieron alguna vez, eran lugares protegidos por varios hombres fuertemente armados, nadie podía entrar ni salir sin autorización, había grupos organizados que se encargaban de cuidar a los niños y de enseñarles las costumbre de antes, había maestros que trataban de enseñar sus materias, tenían que luchar contra la falta de interés de los niños por el aprendizaje y contra su propia falta de fe en que sirviera de algo enseñar esas cosas, tenían un grupo limitado de médicos que se encargaban de atender a los enfermos y estaban los grupos de supervivencia los cuales se dividían en 2, unos eran los encargados de cuidar el lugar y responsables de las vidas de todos los que habitaban ahí, otros eran los encargados de salir a la ciudad a buscar provisiones (comida, medicina, ropa) y también de mantener la comunicación entre los distintos puntos de refugios, a pesar de que se tenían aún algunos medios tecnológicos para hacerlo, la mayoría de las tecnologías habían sido acaparadas por unos cuantos y las manejaban a su antojo.
3 meses han pasado desde aquel golpe de estado, la ciudad ya es irreconocible, es una zona de cuarentena en la que cada quién hace sus propias leyes, cualquier intento por formar un gobierno es aniquilado de inmediato, es un cuerpo más que adorna la putrefacta fachada del palacio municipal y todas las almas que viven aquí dependen de la buena voluntad de los demás para ceder el poder a otra persona que no sean ellos mismos. A todo esto surge una pregunta lógica, si estamos diciendo que todo esto sucede en la ciudad de Urbania ¿porqué demonios no hace nada el gobierno del país para poner el orden? Bueno amigos eso se los contare en la próxima entrega. Nos vemos en la calle.



Agente 07
En una realidad no tan alterna

martes, 21 de agosto de 2012

escuela


Caminito de la escuela



El regreso de vacaciones de verano es siempre un acontecimiento social importante, termina el tiempo de no hacer nada, los cursos de verano, el viaje a la playa, todo esto claro para millones de estudiantes que hace más de un mes se despidieron de sus maestros y compañeros y probaron esa bocanada de aire de libertad que se siente cuando sales a la calle ese último día de clases (hasta suspire)
En pocas palabras y resumiendo todo ese párrafo de melancolismo, para estos individuos el día de regresar a clases es en general una tragedia, hay por supuesto algunas excepciones de gusanos que no tienen vida fuera de las aulas y que el fin de las vacaciones les significa el fin de un periodo de soledad y tortura sin igual, es fácil identificarlos a la entrada de las escuelas ya que son los que lucen una amplia sonrisa en su rostro.
Por otro lado esta la visión de los padres, a ellos las vacaciones de sus hijos les representan sentimientos encontrados, por un lado su horario de levantarse se recorre una hora, no se tienen que parar a las 6 de la mañana a batallar con un niño/adolescente que hará hasta lo imposible por aferrarse a la cama como si tuviera ventosas sin importarle un comino el esfuerzo sobrehumano que esta haciendo su progenitor por que lleguen temprano a la escuela, las vacaciones son una tregua a esa pequeña guerra que se da cada mañana pero por otro lado es también un sufrimiento interminable el tener a un chico hiperactivo con todo el tiempo del mundo y nada que hacer en su casa, eso regularmente se traduce en problemas, por ejemplo, si solo uno de los padre trabaja, las llamadas por parte del que se queda en casa se incrementan en un 300% y claro la mayoría de ellas son quejas sobre las actividades que se le han ocurrido al puberto realizar a lo largo del día, si los dos padres trabajan la situación es muy diferente, las llamadas que se incrementan en un 300%son de la oficina de ambos padres a la casa, en esos días además de lidiar con la presión y el estrés que se generan a diario en la vida laboral, ambos deben luchar con la terrible idea de qu su pequeño querubín se encuentra solo en la casa, tiene todo el tiempo libre del mundo y nadie que le ponga un límite a cualquier cosa que se le pueda ocurrir, la imaginación es un arma muy poderosa y se podrán imaginar la cantidad de cosas que se pueden imaginar 2 padres que estarán 8 horas fuera de su casa y no tienen a nadie que los ayude a supervisar el tiempo libre de su angelito.
Como pueden ver este acontecimiento puede ser bueno o malo dependiendo del contexto en el que nos pongamos sin embargo, abordar este tema desde un punto de vista tan general nos puede llevar (como ya lo ha hecho) a divagar en miles de problemas y quejas sociales de las cuales podríamos llenar un libro sin llegar a nada productivo, por lo que es mejor enfocarnos en un sujeto en particular y vernos reflejados en él irremediablemente.
Supongamos pues que ha transcurrido ya ese periodo (no me atrevo a ponerle algún adjetivo) de vacaciones, la noche del domingo antes de volver a las actividades ha sido como siempre caótica, hay que poner en orden los útiles, tener la ropa planchada, los zapatos limpios, fijar el despertador 3 horas antes de la que ya estábamos acostumbrados y claro hacer el intento por dormir mas temprano también, cosa que por supuesto será poco mas que imposible primero por las preocupaciones y suposiciones de lo que pueda pasar en el primer día de clases y segundo porque el reloj biológico no se puede programar con la facilidad que lo hace el viejo despertador, la hora de dormir se ha recorrido considerablemente este periodo y ahora acostado en la cama y con nada mejor que ver que el techo de su recamara, Javier trata de conciliar un sueño que no encuentra, desgraciadamente para el la regla general en estos casos es que todo aquel que pierde el sueño por las noches suele encontrarlo por las mañanas.
Como era de esperarse el maldito despertador se quedo dormido ¿o fue al revés? Ya no importa, con el tiempo encima Javier salta de la cama como impulsado por resortes, ya no hay tiempo para darse ese baño matutino que nos saca un poco del estado semi inconsciente del que no encontramos a esas horas de la mañana por lo que una simple refrescada en la cara con agua fría tendrá que bastar.
La ropa perfectamente planchada la noche anterior debe aguantar un no tan perfecto ritmo de ajustarse al cuerpo, algún botón mal abrochado y varios pliegues acomodados de manera errónea que no tardarán en generar las indeseables arrugas, la barba que ya es de hace 3 días también tendrá que esperar su encuentro con el rastrillo que parece estar castigado en un rincón del baño del que parece no será retirado jamás. Su cabeza es una maraña tanto de ideas como de cabellos enredados que le dan el aspecto de un borracho saliendo por la puerta de una cantina después de estar todo el día abrazando la botella de licor, los zapatos perfectamente boleados han sufrido los primeros raspones del día ante la incapacidad de levantar los aún dormidos pies en las escaleras, el cielo es aún oscuro por lo que los focos de la casa representan toda la luz que puede obtener Javier a esta hora, también es toda la que sus cansados ojos pueden tolerar, se para frente al espejo y su rostro es para reírse, enormes ojeras circulan sus ojos que hacen ridículos intentos por permanecer abiertos y luchar contra los “potentes rayos” que emiten las bombillas eléctricas, nada que hacer en contra de eso, toma un viejo cepillo y lo pasa sistemáticamente por su alborotado cabello para darle forma a un extraño peinado, mitad clásico, mitad electro punk que no encaja en lo mínimo con su vestimenta, pero no hay tiempo para fijarse en esas cosas, baja rápido las escaleras y llega a la cocina, los platos de la cena de hace unas horas (¿horas? Parecieron minutos) aún se encuentran sobre la mesa, ya después habrá tiempo de limpiar, abre el refrigerador con fuerza desmedida y hace volar algunos de los pequeños imanes que lo adornan, algo mas que recoger después. Huevos al sartén, leche al vaso, trasero a la silla y comida a la boca, todo a una velocidad vertiginosa que no da espacio al actuar de las papilas gustativas, solo a un rápido accionar de masticar y tragar.
Su rápido actuar en la cocina le ha hecho recuperar un poco de el tiempo que perdió durmiendo esos 5 minutos extra, sale corriendo de su casa dirigiéndose a su automóvil y recuerda que ha olvidado algo muy importante, su cartera, corre como bólido por las escaleras, toma su cartera que descansa aún cómodamente sobre el pequeño buró ubicado a un costado de su cama y baja de nuevo corriendo las escaleras rumbo a su coche, esos valiosos minutos que consiguió devorando sin piedad su desayuno se han perdido en esas carreras, llega por fin a su vehículo que espera impaciente a encender el motor y volar rumbo al tráfico cuando se da cuenta que ha olvidado una cosa más, aún más importante, las llaves del coche (no quiero decir aquí las finas palabras que han salido de su boca al darse cuenta de su error) de nuevo a toda velocidad de regreso a su casa, cuya puerta por cierto había dejado abierta y por lo que otra bocanada de flores salen de su lengua, busca las llaves en el lugar designado para colgarlas y no están, el mundo parece venirse encima de él, por suerte en una frenética vuelta de su cabeza hacía ningún lugar puede ver el destello de sus benditas llaves en la mesa del comedor, las toma en su mano y corre, esperando que esta sea la última vez, a su coche 30 segundos después ya vuela por la calle rumbo a la avenida donde sabe que se enfrentara a su mayor enemigo del día de hoy, el tráfico.
No les puedo decir que Javier maneja entre los carros porque me quedaría corto con la descripción, si lo viéramos desde arriba con nuestra cámara satelital podríamos jurar que se tele transporta mágica y temerariamente de un hueco a otro por todo lo ancho de la avenida, el tiempo que lleva podría ser envidiado por varios pilotos de la Formula 1, pero hoy no hay tiempo para las sutilezas, le falta todavía un buen tramo para llegar a su destino y de seguir así lo conseguirá a tiempo, ya paso a la señora que va pintándose, al tipo que va cantando y bailando, ya rechazo a los que venden chicles y cigarros en los altos y estuvo a punto de atropellar a un ciclista que no entiende que en ciudades como Urbania la luz amarilla en el semáforo no significa alto sino “corre aún puedes pasar”
Apenas tiene 60 minutos de estar despierto y ya ha pasado emociones como para llenar el día entero pero por fin ha llegado a su destino, frente a él hay una acera enorme adornada con árboles frondosos que sin duda dan calma y muy buena sombra en un día soleado, varios autos se detienen al igual que el suyo en esta acera para cumplir una misión vital del día, Javier siente como la adrenalina corre por todo su cuerpo al recorrer el barandal metálico que adorna también la banqueta y llega hasta la puerta del colegio donde los padres bajan a sus hijos amorosamente de sus coches, entre todos los olvidos que tuvo el día de hoy, recordó su cartera, recordó sus llaves pero nunca recordó a su pequeño hijo que seguramente duerme aún placidamente en la comodidad de su cama, el primer día de clases tendrá que esperar un poco más.




Agente 07
Recordando

lunes, 13 de agosto de 2012

Olimpismo


El nadador



La escena se desarrolla en 2 lugares totalmente diferentes, un personaje se encuentra de un lado del mundo opuesto al del otro personaje, no se conocen entre si aunque uno de ellos cree conocer a la perfección al otro, es mas que les digo conocer si mas que eso ha sido su consejero, su confidente siempre ha estado ahí en las buenas y en las malas, lo único que los separa son unos cuantos miles de kilómetros pero ¿qué es eso para el corazón? Desde hace ya varios años sus vidas han sido atadas por un cariño mutuo y hoy se desarrolla el evento clave en la vida de ambos, a miles de kilómetros de distancia lo que los une es el fulgor de la televisión, las voces de los narradores y su amor incondicional por ese bendito deporte llamado natación.
Los Juegos Olímpicos son el escenario que une a la ciudad de Urbania ubicada en algún punto de Latinoamérica con Londres histórica ciudad del continente europeo y cede de estos juegos que han visto como por primera vez en su historia un nadador de Urbania ha conseguido llegar a la final de su categoría y peleará por conseguir una medalla olímpica, hazaña que pasaría a la historia como única y tal vez irrepetible en muchos años por venir.
Pero debo aclararles amigos que este nadador no es cualquier nadador, se trata de ------- ------------ campeón de las olimpiadas nacionales, abanderado de la delegación del país y máxima esperanza de triunfo, le respalda una gran carrera como nadador que a sus 27 años parece estar terminando sin embargo ha sido múltiple campeón de los juegos Panamericanos, ha roto todos los récords establecidos en esas competencias y es un héroe nacional que partió rumbo a Londres con cánticos de alegría y buenos deseos. La mayoría de los que lo ven nadar le admiran por su talento y tienen fe ciega en él, saben que dentro del agua no hay quién lo pueda vencer y a menudo se escucha a sus seguidores decir “es un don que Dios le dio”
Lo que ellos no saben es que la vida de --------- --------- no ha sido nada fácil, desde muy temprana edad comenzó a demostrar ese don que tanto le gusta hoy en día a la gente, su infancia fue buena y divertida, su pueblo estaba cerca de la costa y era reconocido por tener varios balnearios a los que una gran cantidad de turistas acudían, la natación fue parte de su vida desde el momento en que comenzó a caminar, pero al igual que todos los niños talentosos sus juegos de infancia se vieron interrumpidos el mismo día en que un entrenador que fue por casualidad a uno de esos balnearios vio como el pequeño --------- ----------- nadaba en contra de sus amigos y con gran facilidad cruzaba las aguas, el ojo experto de este sujeto transformo la figura del niño cruzando la alberca en una bolsa de dinero chapoteando en el agua, de inmediato lo interrogo y no paso mucho tiempo para que el buscador de talentos estuviera a la puerta de su casa para hablar con sus papás, poco fue lo que tuvo que argumentar aquel señor preparado en las artes del convencimiento para tener en la bolsa a los humildes pescadores padres del nuevo prodigio, la promesa de dinero y fama pudieron más que el razonamiento y ---------- --------- solo tuvo una semana para despedirse de sus amigos y mudarse a la que sería su nueva casa, la ciudad de Urbania, específicamente el Centro de Rendimiento lugar que se convertiría en su prisión.
No les voy a mentir, no fue una total tortura para él, amaba la natación y era a lo que se dedicaba todos los días, sus papás lo visitaban de vez en cuando y en cada competencia iba ganando mas y mas seguidores, sus entrenadores se encargaron de mantenerlo al margen de todas las distracciones que un adolescente pudiera tener, claro en la medida de lo posible ya que contra la naturaleza nada se puede hacer.
Su técnica mejoraba día con día y los torneos en los que participaba subían de nivel cada vez mas, para llegar a donde se encuentra el día de hoy tuvo que sacrificar horas de fiesta, convivencia, amigos, amores, familia, todo; pero el día de hoy es el día con el que soñó toda su vida, la gran final de los juegos olímpicos, en donde enfrentaría a los mejores del mundo, en donde demostraría que todas esas horas de sacrificio no habían sido en vano, una medalla significaría su retiro seguro y tendría todavía tiempo, gracias a que aún era bastante joven, de aprovechar la vida y disfrutar de todo eso que había sacrificado.
En esto pensaba mientras en el sonido del estadio mencionaban su nombre y una enorme pantalla lo presentaba en lo alto del estadio, un letrero apareció bajo su imagen mencionando su nombre y sus mejores marcas en la alberca, pudo ver a sus padres en una de las tribunas ondeando una bandera de su país junto a una pequeña porra que se había juntado, debido a la situación económica reinante en aquella parte del mundo era un gran esfuerzo el que hacía estas personas por estar ahí ese día, con excepción de sus padres que habían sido invitados del gobierno, mientras todo esto sucedía dentro de la alberca, del otro lado del mundo en la ciudad de Urbania 2 ojos observaban atentos cada detalle del evento.
Nos encontramos ahora en una sala desordenada, el olor es nauseabundo probablemente de restos de comida dejados entre los escombros de ropa y papeles que se distribuyen por todo el piso a manera de minas, la televisión al igual que desde hace 12 horas esta encendida sintonizando el canal exclusivo de los Juegos Olímpicos, el sillón que se encuentra frente al aparato es ocupado por un sujeto gordo, desaliñado con barba de hace 3 días que no viste mas que sus calzoncillos (sucios ya que no se ha cambiado desde hace días) y una camisa interior que se supone debería ser blanca pero ahora tiene un mapa de manchas de comida y de sudor sobre todo en el área de las axilas, la cual podríamos suponer que ya se ha adherido al cuerpo de su huésped como un parásito chupa sangre; una de las pesadas piernas de este sujeto descansa sobre la mesa central de la sala y esta envuelta por un vendaje de yeso, protege por supuesto a una dolorosa lesión sufrida hace 3 semanas por nuestro personaje el cual convenientemente ha obtenido una incapacidad por parte de los servicios médicos del gobierno para permanecer sin trabajar durante este periodo de tiempo.
Dicen los que saben que no existen las casualidades y en este caso no los podría contradecir, la lesión sufrida por este individuo no fue una cosa que coincidiera con los Juegos Olímpicos, al enterarse nuestro amigo de que su nadador favorito participaría en los juegos, contrato de inmediato un paquete de televisión de paga que se anunciaba como cobertura total, acto seguido fue a una tienda de licores, compró una botella de vodka y comenzó a beber en forma de ritual, no festejaba nada, no se lamentaba de nada tampoco y no estaba acompañado, de haberlo estado seguramente no habría podido cumplir su misión, bebió y bebió hasta que la idea que tenía en la mente no le pareció tan mala, subió a la azotea de su casa y aún con la botella en la mano saltó desde el segundo piso fracturando así su tobillo derecho y dejando bastante lastimada su espalda en varios puntos, no es que no lo hubiera intentado de otra manera mientras estaba sobrio, pero no tenía el valor para auto flagelarse, por eso la botella de vodka, una vez en el suelo y a pesar del dolor una sonrisa invadió su rostro, ahora su plan estaba completo, se arrastro hasta su casa y espero a que pasara la resaca el día siguiente, fue entonces cuando llamó a su oficina para reportar que había sufrido un aparatoso accidente, le enviaron de inmediato una ambulancia que le atendió y después de darle medicamentos para el dolor y un vendaje adecuado fue enviado a su casa con las instrucciones estrictas de moverse lo menos posible.
Es aquí donde lo encontramos siguiendo a raya las órdenes del doctor y emocionado casi hasta las lagrimas después de haber visto como en la semifinal ------- -------- nadador al que ha seguido desde sus inicios y al que idolatras mas que a cualquier dios conocido por la humanidad, ah pasado sin problemas a la final y es llamado a ser el primer medallista en la alberca para su país.
Ahora lo ve en la pantalla aparece su nombre y sus tiempos y saluda al público, el gordo sujeto del sillón lo saluda, le grita porras y le dice tu puedes, este es nuestro momento y es que en realidad lo siente así, para él es el momento crucial en su vida, no puede imaginar momento más importante o trascendente que le haya tocado vivir, siente como la adrenalina corre por sus venas y hasta toma grandes bocanadas de aire para controlarse un poco.
Del otro lado del mundo ------- -------- también siente como le falta el aire, no se imagina que a miles de kilómetros de ahí hay un sujeto gordo en calzoncillos que esta a nada de masturbarse solo de imaginarlo subiendo al podio, solo puede escuchar los gritos de apoyo y los murmullos del estadio como si ya se encontrara bajo el agua, la presión es enorme el saber que toda tu vida se resume en 100 metros de distancia y aproximadamente 45 segundos, después de eso podrá estar en paz. Ya toma su posición para el disparo de salida, el gordo en el sillón comienza a sudar y una lagrima se escapa de su ojo izquierdo y corre por su grasosa mejilla, esta a punto de presenciar el logro de su vida, lo siente así ya que en realidad toda su vida ha sido un mediocre empleado brincando de puesto en puesto sin la mayor virtud que guardar en su cerebro innumerables cifras y fechas de los triunfos de -------- -------- de este evento dependen las anécdotas que contará a sus nietos (claro si encuentra a alguien lo suficientemente valiente como para reproducirse con él) ah llegado el momento, los comentaristas en la televisión elevan sus voces de la emoción, dicen que hoy “puede ser un gran día” en el estadio la voz de los altavoces indica a los nadadores que tomen sus marcas, es el momento, el resumen de una vida y todos sus sacrificios recompensados, 5, 4, 3 ,2 1… explosión de nervios y adrenalina ------- --------- salta a la alberca y comienza con su frenético braceo y pataleo pero hay un problema, o salió a una velocidad impresionante o es el único que se encuentra en el agua; del otro lado del mundo con la televisión a todo volumen se escucha un grito de dolor y frustración que proviene del departamento del gordo en calzoncillos, la televisión muestra como -------- --------- sale de la alberca envuelto en un mar de lagrimas, vomita y se desmaya, los comentaristas confirman que desgraciadamente la salida en falso en la final da como resultado la eliminación directa, es una tragedia olímpica pero el evento debe continuar, en esta ocasión los nervios pudieron mas que la preparación, el atleta lo entenderá con todo el dolor de su corazón, no es el primero ni el último al que le haya pasado pero requerirá mucho apoyo para salir adelante de esta, el resumen de su vida se fue más rápido de lo que pensaba, 3 minutos después la prueba se reanuda y en esta ocasión si se escucha el disparo de salida, los nadadores saltan al agua en busca de la gloria olímpica, una camilla saca al desvanecido -------- -------- que aunque no lo sepa se va entre aplausos. Mientras tanto al otro lado del mundo el disparo de salida que ahora si es valido es acompañado de otra detonación que alerta a todos los vecinos, el gordo de los calzoncillos ha decidido al igual que su ídolo retirarse de su pasión, mientras el nadador ganador de la medalla de oro es premiado los sesos de nuestro gordo fanático resbalan lentamente por la pared.


Agente 07
Fan # 1

viernes, 3 de agosto de 2012

version


Otra versión de la realidad

Una tarde común en Urbania, las calles como siempre a esta hora del día lucen abarrotadas de vehículos que llevan un ritmo lento e hipnotizante y que le dan vida a las venas de la ciudad, una apenas perceptible nube de humo escapa de cada automóvil para mezclarse rápidamente con el aire que respiramos todos, los ruidos cotidianos se escuchan por todos lados; platicas, gritos, chiflidos, rechinar de llantas, mentadas de madre o música popular a todo volumen que viene del interior de un destartalado y viejo auto, su dueño la comparte como si fuera un regalo para todos los que se encuentran a su alrededor, mientras todos nos preguntamos porque demonios escucha esa música y algunos más hacen el comentario que se antoja lógico “con lo que se gasto en el sonido de su coche, mejor se hubiera comprado un mejor vehículo”
Es un día común en Urbania, la jornada laboral ha terminado y comienza el éxodo de trabajadores a sus casas, a los bares, a los moteles o a donde quiera que se dirijan, lo cierto es que para llegar a su destino todos deben coincidir en la calle.
Pero ahí justo en medio de ese día normal hay algo diferente, imperceptible para la gran mayoría de los que pasan por el lugar y sin importancia para los que si lo notan, ahí por encima del río de automóviles justo en el borde del abismo que separa la estructura del puente peatonal de la caída de 10 metros hacia los coches se encuentra sentado un hombre, por su aspecto podríamos decir que es un importante hombre de negocios, quizá algún político, lleva un costoso traje de diseñador, mancuernillas doradas de las cuales no dudaría en pensar que son de oro, una fina corbata italiana y unos vistosos zapatos recién lustrados que reflejan los destellos del sol que a esta hora del día ya comienza su camino hacia abajo. Es un personaje totalmente fuera de contexto, encajaría mejor sentado a la mesa de un carísimo restaurante de comida exótica o en la barra de un exclusivo club de nudistas, sin embargo se encuentra aquí, mezclado entre los demás y sentado al borde del abismo.
Los pocos que lo ven lo juzgan de loco, algunos pocos se preocupan y comentan entre sus conocidos “mira ¡va a saltar!” incluso se detienen un poco para ver si con un poco de suerte les toca ser espectadores de esa tétrica función, sin embargo la tercera llamada nunca es anunciada y nuestro sujeto permanece inmóvil en su puesto, con la mirada perdida en el infinito, su impecable peinado, impecable y su rostro sin ninguna expresión, no pasa mucho tiempo para que su publico se enfade y continúe su camino y es que en Urbania no hay mucho tiempo para perderlo en detalles sin importancia.
El hombre del traje que contempla melancólicamente la ciudad contempla en realidad la vida misma, se ha detenido un tiempo para tratar así de detener el tiempo también, tal y como todos los que lo ven suponen es un importante empresario de la ciudad, tal vez el patrón de muchos de los que pasan bajo su puesto vigía en sus vehículos, sin embargo ha escogido este rincón de Urbania para su momento de paz, se ha dado cuenta de repente, como esas ideas geniales que en otras épocas le llegaban y le ayudaron a forjar su imperio, de que el ritmo de la vida se ha vuelto vertiginoso, apenas el día de ayer celebraba el domingo con su familia y hoy ya es viernes, no recuerda en que se paso toda la semana, no consigue recordar algo memorable realizado el último mes, ya ha pasado más de la mitad del año y el apenas siente que se libera de la resaca que le ocasionó la fiesta de año nuevo.
La vida viaja en un automóvil deportivo y en calles sin tráfico, es imposible de alcanzar y lo único que queda por hacer es tratar de ponerle algún obstáculo, alguna luz roja para que disminuya un poco la velocidad y le permita dar un respiro a nuestro importante amigo.
Desde ahí comienza a pensar en como será la visión del mundo que tienen otras personas, el en su cabeza tiene una versión de Urbania muy particular, la cual esta llena de opulencia, golf los sábados por la mañana, sauna los domingos, algún restaurante caro los viernes por la noche, de lunes a viernes reuniones en penthouse y clubes de industriales, secretarias con cuerpos espectaculares, diferentes idiomas, volver a casa en un vecindario tranquilo y privado, cenar carne todas las noches y nunca preocuparse por la falta de dinero en las cuentas. No es que esto lo hiciera sentir mal, por el contrario sabía todo el esfuerzo que esa vida le había costado, horas de trabajo que implicaron sacrificar la diversión, la convivencia y hasta el amor de la mujer que realmente amo y a la que nunca le pudo dedicar el tiempo que ella requería, ahora recuerda esos tiempos en los que era un principiante y estaba convencido que para poder triunfar en la vida había que sacrificar algunas cosas, pero también ahora tiene curiosidad por esas otras versiones de Urbania y desde su poco usual butaca se dedica a seleccionar transeúntes y a imaginar sus historias y las versiones que podría escuchar de ellas.
Se ajusta sus lentes, distinta graduación en cada uno de sus ojos (un sacrificio más realizado en Pro del éxito) y puede ver caminando a duras penas por la calle a una mujer que carga al parecer 5 bolsas de un supermercado cercano, su caminar es rítmico pero cojea un poco, no parece tener ninguna molestia física además del cansancio por cargar las bolsas que refleja su rostro por lo que nuestro amigo supone que la causa del renqueo debe ser la caída de uno de sus tacones, problema bastante común entre las mujeres por lo que ha podido escuchar.
Las 5 bolsas de mandado hacen pensar que esta mujer es madre de por lo menos 3, ¿pequeños, adolescentes? Dejémoslo a la imaginación, supondríamos también que es madre soltera ya que de no ser así su pareja la ayudaría a cargar esas bolsas, pero ¿Qué tal si su esposo aún se encuentra trabajando? O quizá esta en el extranjero o tal vez probabilidad alta también es uno de esos tipos a los que les inculcaron la idea de que las mujeres son las esclavas del hogar y el sujeto simplemente se encuentra en su casa acostado observando la televisión, enojado ya que tiene hambre y su ingrata mujer aún no llega de trabajar. Mientras piensa todo esto la mujer continua con su torpe caminar y sale de su línea de visión, es hora de enfocar un nuevo objetivo, otra versión de Urbania y su mirada se enfoca en un grupo de jóvenes al parecer de edades entre los 17 y 20 años todos portan el uniforme de una Universidad medianamente reconocida, son un grupo pintoresco de 5 jóvenes, 3 son hombres, 2 son mujeres, la versión de la ciudad que tienen los jóvenes debe ser totalmente distinta a la que nuestro amigo tuvo en sus años de universidad, no le cuesta trabajo imaginar a este grupo de desaliñados entrar en algún bar con promociones para estudiantes y beber cerveza hasta no coordinar bien ni siquiera el movimiento de sus lenguas, para después terminar en la casa de alguno de ellos (obviamente el que tenga a los padres con el trabajo más pesado) dormidos, besándose o hasta teniendo relaciones sexuales, es viernes suena como un buen plan para un estudiante, sin embargo puede ser que en oposición a lo que el se imagina en realidad este grupo sea solo coincidente en la parada del autobús y que cada uno de ellos se vaya a su casa sin mas plan que ver la televisión o jugar video juegos, tal vez en su escuela los entrenan para vivir en una ciudad en la que a nadie le importa lo que le pase al que esta al lado siempre y cuando no afecte sus intereses, sería interesante conocer la versión de l realidad de todas esas personas y es curiosos pensar que lo que cada uno de nosotros llamamos vida puede ser tan solo un sueño para alguien más.
Su teléfono móvil no ha parado de sonar en varios minutos mientras el analiza a las personas que pasan por el puente, muchas de esas llamadas deben ser de su secretaria o de sus socios para inundarlo con más cuestiones de trabajo de las que muchos podrían soportar, pero entre ellas también deben estar las llamadas de su esposa, a quién prometió llevar al teatro y por la que debería haber pasado hace ya mas de una hora lo que sin duda le hace suponer que estará como fiera cuando por fin decida regresar a casa, automáticamente comienza a generar una excusa, no será difícil considerando la cantidad de llamadas de la oficina que tiene en su celular, en una mirada final a la calle puede ver a un sujeto tirado en la banqueta, una evidente mancha de orina se encuentra en su pantalón, porta una camisa desgarrada que en otros tiempos fue blanca y hoy es un concierto de manchas de todos colores que sin duda serían todo un mosaico de historias para contar, en su mano hay una botella semi vacía de alcohol y todas las personas que pasan por ahí se hacen a un lado o cambian la expresión de su rostro por una con desprecio.
Por un momento nuestro exitoso y adinerado hombre de negocios llega a envidiar a aquel borracho de banqueta, ilustre imagen de la lotería quien sin ninguna preocupación yace en la vía publica, no sabe que va a cenar, no tiene un teléfono que le suene todo el día, no debe llegar a tales horas para llevar a su esposa al teatro y si no llega a algún lugar no recibirá ningún reclamo, no tiene un cerebro que automáticamente genera excusas y mentiras simple y sencillamente porque no lo necesita, esa es una versión de la realidad que nuestro amigo nunca conocerá, el sujeto de la banqueta es tan intrascendente que nadie se detiene a ver si se encuentra vivo o muerto ya tiene varias horas sin moverse, quizá ya tenga días de muerto ahí en la banqueta, como si fuera un perro atropellado a un costado del camino y sin embargo nadie se acerca a comprobarlo porque a nadie le importa, lo curioso es que si se descubriera que efectivamente estuviera muerto, tendría un lugar en los noticieros nocturnos, privilegio reservado para muy pocos en la ciudad y entonces tal vez hasta darían a conocer su nombre y su origen, curioso es vivir en un mundo en el cual para llegar a ser tomado en cuenta primero debes morir y sin embargo aquí estamos.
El hombre del elegante traje se levanta de su puesto vigía, como desde hace horas nadie le presta atención, de pie ahora ante la caída que irremediablemente le traería la muerte, siente la tentación inexplicable de arrojarse al vacío, tal vez alegrarle el día a ese empleado que lo odia y darle el gusto de atropellarlo, se imagina el alboroto que se formaría, la cantidad de medios que cubrirían este evento, las innumerables versiones que explicarían las razones que tuvo para aventarse a una muerte segura, la cantidad de testigos que asegurarían haberlo visto sentado en ese puente y que no hicieron anda para detenerlo y sin embargo en las tomas de televisión y las fotografías de los diarios aparecería el cadáver del borracho en la calle sin que a nadie le importara un comino, ironías de la vida saber que ni siquiera en la muerte encontrará la paz, es la versión de la ciudad que le toco vivir y es la que conoce, las demás solo las puede imaginar y sin embargo fue su principal motivo para continuar aquí, para no dar ese salto, no conformarse con su versión de la ciudad, descubrir o por lo menos imaginar todas las que sean posibles, tal vez de esa manera pueda encontrar algo trascendente que recordar en la próxima semana. Nos vemos en la calle.


Agente 07

Colgado del puente